Para destacar nuestras competencias y cualidades profesionales en nuestro CV es necesario conocer la Taxonomía de Bloom.
El Currículum Vitae sigue siendo una herramienta fundamental para encontrar trabajo y darte a conocer como profesional. Es la primera impresión que se van a llevar las empresas sobre ti, por eso, tienes que hacer que sea inmejorable. La redacción de un perfil o un CV es muy importante por lo que debemos añadir información de relevancia para el puesto que nos interese. Debemos esforzarnos por hacer nuestro CV atractivo, donde se destaquen nuestras habilidades, para que cuando sea leído se comprenda que somos realmente profesionales y tenemos que tener mucho cuidado con no mentir en el CV.
¿Qué es la Taxonomía de Bloom?
La taxonomía de Bloom es una teoría diseñada por Chicago Benjamín Bloom, que se utiliza para evaluar el nivel de conocimiento adquirido en un área.
Esta teoría ha ido cambiando y se ha adaptado a los nuevos tiempos. Actualmente, se considera que el consta de diferentes etapas que se construyen unas sobre otras: recordar, entender, aplicar, analizar, evaluar y crear.
Cada una de sus etapas está asociada a diferentes verbos, que entran dentro de su campo semántico amplio. En este sentido, la primera fase, comprender, está relacionada con los verbos «expresar» y «explicar». Pero en esta fase seremos aún incapaces de «modificar» lo comprendido o «solucionar» problemas, porque estos verbos se agrupan en la siguiente fase: aplicar.
Podemos definir el siguiente “recorrido” a partir de esta jerarquía:
- Recordar: este nivel trata de recordar el conocimiento que ya se posee. El alumno debe recordar hechos universales y globales, terminología, esquemas, procesos, teorías, etc.
- Comprender: es el segundo nivel. Aquí se trata de que se comprenda e interprete la información, expresando las ideas con sus propias palabras.
- Aplicar: llevar a cabo un procedimiento a través de la ejecución o implementación del mismo.
- Analizar: disgregar contenido o conceptos determinando las partes relacionadas entre sí o con respecto a una estructura o propósito más grande.
- Evaluar: se refiere a la capacidad de formular juicios de valor sobre un material concreto para un propósito determinado. Y ello basándose en criterios bien definidos.
- Crear: unir los elementos para crear un todo coherente y funcional, reorganizar elementos en une nueva estructura mediante la planificación o la producción.
Este método es tan importante y necesario tanto en el plano educativo como en el plano profesional y resulta especialmente ventajoso para clasificar las competencias profesionales en un CV.
Cómo aplicarlo a las competencias de tu CV
Si tu idea es redactar un CV más esquemático, puedes enumerar tus habilidades y emparejarlas con los verbos de la taxonomía de Bloom. Si por el contrario, te decantas por la versión más extenso, entonces redacta frases más detalladas. Por ejemplo: dispongo de conocimiento aplicado del gestor de contenidos WordPress (dejando claro que sabes clasificar, simular, producir, solucionar, dibujar, manipular, etc.).
Es muy importante elegir el formato adecuado y saber seleccionar la información que podemos incluir y la que debemos eliminar, además, es esencial saber cómo potenciar ciertas habilidades en detrimento de otras dependiendo de los requerimientos del puesto al que se acceda. Aquí es donde entra en juego la taxonomía de Bloom.
Aplicar la taxonomía del Bloom en un CV no es una tarea complicada; sin embargo, aporta mucho valor. Si se presta atención en este tipo de detalles, la imagen que se ofrece de uno mismo es mucho más profesional. Además, también te permite destacar entre los demás candidatos que optan al puesto de trabajo vacante.
¿Qué ventajas tiene la aplicación de la taxonomía de Bloom?
Aplicar la taxonomía de Bloom a la hora de elaborar nuestro CV no es una tarea difícil y, sin embargo, le aportará un gran valor. Poniendo atención a los detalles, la imagen reflejada será mucho más profesional y diferencial. ¿Quieres conocer cuáles son las ventajas más importantes de aplicar este método?
- Con esta teoría podrás tener un CV más serio y demostrar implicación.
Tener un lenguaje claro y apropiado refleja tu imagen profesional. Además, las empresas verán que eres un perfil de candidato con las ideas claras e implicado en dar lo mejor de sí, cualidad que puede extenderse a todo el trabajo que esa persona desempeñe en su empleo.
- Mayor nivel de autoconocimiento.
Pensar en el nivel que se posee en cada competencia ofrece un grado de autoconocimiento que no se adquiere mediante una evaluación tradicional. Tener consciencia de uno mismo y de qué sabemos o dejamos de saber es un elemento crucial para desempeñar bien nuestro trabajo en cualquier entorno.
Esta es otra de las grandes ventajas, la sensación que se tiene al leer el currículum tiene que ser lo más positiva posible. Es muy importante para captar la atención de los profesionales de RRHH encargados de leerlo. Disponer de una serie de habilidades es muy importante y beneficioso, pero de nada servirán si no logras transmitirlas adecuadamente durante el proceso de selección. Por ello, utilizar el léxico de la taxonomía de Bloom dará una imagen precisa de tus competencias profesionales.
Ahora que la conoces un poco más, ¿Qué te parece la Taxonomía de Bloom? ¿Te animas a usarla en la creación de tu CV?