¿Sabías que hay costumbres italianas que no encontrarás en ningún otro país? ¡Así es, somos gente a la que le gusta distinguirse! Tenemos «reglas» no escritas que forman parte de nuestra rutina y que se transmiten desde siempre. Si esto te ha llamado a la atención, deberías leer este artículo?
¿El desayuno es la comida principal? ¡¡No para nosotros!!
El desayuno debe ser la comida más importante del día, rica en calorías, tal vez con jamón, huevos o frijoles, pero en Italia no es así. De hecho, por lo general, los italianos tomamos un café o cappuccino acompañado de un croissant. Hablando de cappuccino, según las costumbres italianas sólo se toma por la mañana, así que, si pides uno para almorzar o merendar, es probable que recibas una mirada escéptica de parte del camarero.
El café es un ritual
El café, a cambio, se toma a todas horas, incluso después de la cena. El vínculo de los italianos con el café es una historia de amor indisoluble. El café se toma en la barra, sin siquiera sentarse, y por lo general siempre se ofrece a los amigos que entran en el bar. Además, se bebe caliente y debe ser rigurosamente un espresso.
¡La cocina Italiana es sagrada!
Si hay algo que los italianos auténticos no pueden tolerar, es la transformación exótica de las recetas tradicionales. La pasta con ketchup, la pizza con piña, el café con leche durante o después del almuerzo, tal vez acompañado de alimentos salados, la carbonara con nata o el café aguado, son cosas que el italiano no acepta, van en contra de todos sus principios. Cocinar es un arte y comer es el momento de disfrutar y apreciar ese arte. Importante: si comes un plato de spaghetti nunca pidas un cuchillo para cortarlos, sería un delito. Tienes que aprender a enrollarlos con el tenedor y, como mucho, te permitimos que te ayudes con una cuchara.
…Perdona, ¿Cómo te has vestido?
Por lo general, los italianos se preocupan mucho por su apariencia; de hecho, difícilmente encontrarás personas descuidadas y desordenadas en la calle, aunque sea para una compra rápida, echar gasolina o ir a por una barra de pan. Si en otros países es normal ir de compras en total comodidad, incluso en pijama y babuchas, esto nunca pasaría en Italia, ¡tenemos el estilo en el ADN!
Después del almuerzo está prohibido bañarse
Un hecho muy curioso de las costumbres italianas que nos distingue es nuestro miedo a las indigestiones. Cuando se pasa todo el día en la playa, las familias italianas llevan comida para alimentar a un ejército, es decir, almuerzos no muy dietéticos y ligeros, ya que, citando a cualquier madre: “se sabe que el mar hace que los niños tengan aún más hambre”. Después de que los niños hayan llenado bien sus barriguitas, está absolutamente prohibido bañarse de inmediato y deben esperar al menos tres horas.
Besos: ¿Derecha o izquierda?
Otra cosa que nos caracteriza es la manera de saludarnos. En primer lugar, nunca besar en la mejilla a una persona a la que acabas de conocer, un apretón de manos es más que suficiente. Después de haber tomado confianza se puede intercambiar el beso. ATENCIÓN: siempre a partir de la derecha y no a la izquierda como en España. ¡Si no tienes cuidado terminarás besando en la boca! Al margen de eso, entre amigos son muy frecuentes efusiones como abrazos, palmaditas en los hombros y caricias. ¡Nos gusta expresar nuestro afecto!
¿A qué hora nos vemos?
El concepto de puntualidad para los italianos es relativo, aún más desde Roma para abajo. Para nosotros, llegar tarde no es un gran problema y no hay razón para quejarse. “Nos vemos a las 19:00″ puede comprender un espacio de tiempo aproximado que va de 19:00 a 19:45 máximo. Para los ciudadanos de otros países la puntualidad es muy importante y esta forma de actuar puede considerarse ofensiva, pero no es nuestra intención ofender a nadie, ¡lo prometo!
Los italianos no pueden comunicar sin mover las manos
Existe una forma de comunicación no verbal que los italianos utilizan para que les entiendan: los gestos. No existe un manual oficial para explicar los significados de los gestos, estos se transmiten de generación en generación de manera natural. Cuando gesticulamos no movemos las manos al azar, sino que hacemos gestos específicos para indicar un mensaje en particular.
Podríamos comunicar un concepto incluso sin hablar, ¡con un solo gesto!
Por ejemplo, si nos sentimos llenos y no queremos comer nada más, basta con mover la mano de izquierda a derecha, con la palma abierta y hacia abajo, esto significa: “basta, ya no puedo más”. Al golpear repetidamente el lado izquierdo de la mano derecha en la palma de la mano izquierda, estamos diciendo “vámonos ya”. O incluso, cuando la mano con el dedo índice y el pulgar abiertos se mueven repetidamente a la derecha y a la izquierda acompañados de una expresión de abatimiento significa: «no queda nada/no hay nada que hacer». Con los gestos podemos también hacer ironía y sátira de manera teatral. Cuando la mano asume casi la forma de una marioneta hablante está a indicar a alguien que habla demasiado y cuenta o dice cosas que luego no corresponden a la verdad. Por cierto, el gesto que más nos representa en el mundo es la mano a cuchara que significa: “¿Qué quieres/ qué dices?”, en particular cuando no estamos de acuerdo con lo que se nos está pidiendo o diciendo.
En fin, a pesar de todo esto, puedo asegurarte una cosa: cuando vengas a Italia y no respetes ninguna de estas costumbres curiosas, no pasa nada, te daremos la bienvenida con alegría haciéndote sentir como en casa y ofreciéndote toda nuestra ayuda para que tu estancia sea inolvidable, porque al fin y al cabo somos, en nuestra esencia, uno de los países más acogedores del mundo.