Seguridad laboral en atmósferas explosivas: Claves para la prevención de accidentes
Manuel Felipe Moreno Rojas
Las atmósferas explosivas suponen un riesgo grave en entornos laborales donde se manipulan sustancias inflamables como gases vapores nieblas o polvos combustibles. La combinación de estos elementos con una fuente de ignición puede provocar explosiones con consecuencias catastróficas. Por ello es muy importante conocer las medidas de prevención que pueden evitar accidentes y reducir la exposición al peligro en distintos entornos de trabajo. La seguridad laboral en estas circunstancias requiere de estrategias bien estructuradas basadas en la identificación evaluación y mitigación de riesgos.
¿Qué es una Atmósfera Explosiva?
Una atmósfera explosiva es aquella mezcla con el aire en condiciones atmosféricas de sustancias inflamables en forma de gases vapores nieblas o polvos que en presencia de una fuente de ignición pueden provocar una combustión que se propague por toda la mezcla. Esto representa un peligro significativo para los trabajadores en industrias químicas petroquímicas agrícolas textiles y muchas otras.
Para evitar accidentes es importante comprender las propiedades de los materiales involucrados su comportamiento ante distintas condiciones ambientales y la forma en que pueden interactuar con otros elementos en el entorno laboral. Además de la naturaleza de las sustancias inflamables la disposición de los equipos y la ventilación juegan un papel clave en la reducción del riesgo.
Clasificación de Zonas ATEX
Para reducir los riesgos las zonas de trabajo se clasifican en función de la probabilidad y duración de la presencia de una atmósfera explosiva. La normativa ATEX define estas áreas de manera específica permitiendo la implementación de medidas adecuadas para cada caso:
- Zonas 0 1 y 2
- Zona 0: presencia continua frecuente o prolongada de atmósferas explosivas se encuentra en depósitos cerrados conductos o áreas confinadas con concentración constante de gases inflamables.
- Zona 1: posible formación de atmósferas explosivas en condiciones normales de operación por ejemplo en espacios con fugas controladas o donde los procesos industriales liberan sustancias inflamables de manera intermitente.
- Zona 2: presencia de atmósferas explosivas poco probable y por periodos cortos generalmente en áreas con ventilación adecuada donde una posible fuga se disiparía rápidamente.
- Zonas 20 21 y 22:
- Zona 20: presencia continua frecuente o prolongada de nubes de polvo combustible por ejemplo en silos de almacenamiento o fábricas de procesamiento de harinas.
- Zona 21: posible formación de nubes de polvo en condiciones normales de operación en áreas de producción manipulación o transporte de materiales pulverulentos.
- Zona 22: presencia poco probable y por cortos periodos de polvo combustible en instalaciones con medidas de limpieza y control eficientes.
Medidas Preventivas
La prevención en atmósferas explosivas se basa en identificar los riesgos y aplicar medidas para reducirlos al mínimo posible. Una estrategia de prevención efectiva debe contemplar aspectos técnicos organizativos y de formación para garantizar la seguridad en el entorno de trabajo:
- Identificación y evaluación de riesgos
- Realizar estudios de las sustancias presentes y su comportamiento en distintas condiciones.
- Analizar posibles fuentes de ignición tanto mecánicas como eléctricas
- Evaluar la concentración de sustancias inflamables para determinar el nivel de riesgo.
- Control de atmósferas explosivas
- Sustitución de sustancias peligrosas por otras menos inflamables cuando sea viable.
- Ventilación adecuada para reducir la concentración de sustancias inflamables y evitar su acumulación en zonas críticas.
- Uso de gases inertes para disminuir la presencia de oxígeno y evitar la propagación de incendios o explosiones.
- Control de temperatura y humedad para minimizar la probabilidad de generación de chispas o acumulación de polvo combustible.
- Eliminación de fuentes de ignición
- Utilización de equipos eléctricos y mecánicos certificados para zonas ATEX con sistemas de seguridad integrados.
- Prevención de descargas electrostáticas mediante conexión a tierra y materiales antiestáticos especialmente en áreas con alta generación de fricción.
- Implementación de procedimientos de trabajo seguros que eviten acciones que puedan generar igniciones como chispas golpes o sobrecalentamientos.
- Medidas organizativas
- Reducción del número de trabajadores en zonas de riesgo minimizando la exposición.
- Formación y capacitación sobre seguridad en atmósferas explosivas asegurando que los trabajadores conozcan los riesgos y las mejores prácticas de prevención.
- Programas de mantenimiento y limpieza para evitar acumulación de sustancias inflamables en equipos y superficies reduciendo así la posibilidad de generación de atmósferas peligrosas.
- Uso de señalización adecuada para advertir sobre zonas peligrosas y reforzar la concienciación en el entorno laboral.
- Planificación de emergencias
- Elaboración de planes de evacuación y respuesta ante explosiones garantizando que todos los trabajadores sepan cómo actuar en caso de accidente.
- Dotación de equipos de emergencia y comunicación efectiva en caso de accidentes incluyendo sistemas de detección y alarmas de advertencia temprana.
- Simulacros periódicos para evaluar la eficacia de los protocolos de seguridad y mejorar la respuesta ante incidentes.
Normativa aplicable para este tipo de situaciones:
La Ley 31/1995 de Prevención de Riesgos Laborales establece la obligación de evaluar los riesgos y adoptar medidas para proteger a los trabajadores frente a atmósferas explosivas. También es de aplicación el Real Decreto 681/2003 que regula las disposiciones mínimas de seguridad en este ámbito. Ambos marcos normativos obligan a los empresarios a garantizar la seguridad de sus trabajadores mediante la identificación control y prevención de riesgos asociados a atmósferas explosivas.
Además, es importante cumplir con las normativas europeas de seguridad como la Directiva 1999/92/CE que establece los requisitos mínimos para mejorar la protección de los trabajadores en zonas con riesgo de explosión. La implementación de estas regulaciones no solo previene accidentes, sino que también mejora la eficiencia y productividad de los entornos laborales asegurando condiciones óptimas para los trabajadores. Si quieres saber más te animamos a realizar el Máster Oficial Universitario en Prevención de Riesgos Laborales + 60 Créditos ECTS.
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