Está más que claro que las actividades de posicionamiento de una marca ya no deben limitarse a los medios convencionales o a los nuevos medios. Con la entrada en juego y la creciente expansión de las redes sociales, tenemos acceso a nuevos soportes y dispositivos, lo que implica una nueva realidad social en la cual las empresas deben hacer especial hincapié en el conocimiento de los nuevos terrenos y en el cambio de las reglas del juego.
Uno de estos nuevos terrenos en el que toda empresa que pretenda tener cierta notoriedad debe adentrarse es en el mundo de los influencers. Los influencers están en nuestro día a día y las empresas deben forzosamente destinar esfuerzos en conocer qué y quiénes son, cómo es su funcionamiento y qué es lo que debe esperarse de ellos.
El influencer era en sus inicios un personaje famoso que todo el mundo (o gran parte de él) seguía y debía hacerle caso pero, sin embargo, este concepto inicial se ha visto modificado por la evolución de las redes sociales: hoy en día cualquiera tiene acceso a las redes sociales y es difícil saber diferenciar entre un personaje que es realmente un influencer y un personaje que simplemente tiene cierta notoriedad puntual o quiere promocionarse.
¿Qué entendemos por influencer?
Según SimplyMeasured: “un influencer es todo personaje que tiene una voz más alta y alcanza audiencias más altas o bien, audiencias más de nicho que otros”. En otras palabras, antiguamente un influencer solía ser un personaje archiconocido de Hollywood o un cantante de moda pero ahora, con la nueva dinámica de las redes sociales, no es necesario ser un actor o un cantante de renombre; con tener, por ejemplo, un canal de Youtube debidamente posicionado que interese a una amplia audiencia es más que suficiente.
Los inluencers están de moda y no hay estrategia de marketing que pueda impedir su influencia y, como no podemos luchar contra el enemigo, deberemos unirnos a él. Por ello, cada vez más empresas ya destinan parte de sus recursos de marketing en utilizar a uno o varios influencers para llegar con más certeza a su audiencia objetivo. De hecho, el 60% de los responsables de marketing prevén incrementar el presupuesto destinado a este tipo de fichajes a lo largo de 2015.
¿Cómo podemos encontrar al influencer ideal?
Las redes sociales son un hervidero de personajes más o menos públicos y, diferenciar cuál de ellos es realmente un influencer puede ser una tarea de gran dificultad. Para determinar quién puede ser nuestro influencer ideal, deberemos tener en cuenta dos aspectos clave:
- Su alcance y relevancia: No importa si un influencer llega a millones de seguidores si ninguno de ellos forma parte de nuestro target objetivo.
- La resonancia de sus acciones: Un influencer verdadero es aquel que sea capaz de crear interacciones con seguidores que aporten un valor añadido a la marca.
No obstante, toda empresa deberá encontrar la combinación ideal de parámetros de medida que se adapte más a sus estrategias de marketing. Es decir, sí es cierto que es importante conocer cuántos seguidores tiene un influencer pero será mucho más relevante conocer, por ejemplo, si los seguidores son influeyentes, si el influencer tiene una cierta continuidad en sus publicaciones (o si sólo hace publicaciones muy puntuales), si “engancha” con sus actuaciones y, lo más importante, si puede encajar con nuestra estrategia de contenidos y es capaz de dinamizar nuestras redes y las actividades de nuestros clientes objetivo.
La sociedad está en continuo cambio. Si además tenemos en cuenta que el marketing pretende en todo momento influenciar sobre ella, es imprescindible una adaptación continua y el fichaje de influencers se está definiendo como la mejor alternativa.