La flexibilidad horaria, o flexitime, es un concepto que está cada vez más presente en los departamentos de recursos humanos, y es que los nuevos modelos organizativos y las tecnologías están contribuyendo a generar una nueva visión de la jornada de trabajo como tal. Por ello, los responsables de los departamentos de recursos humanos están en la obligación de plantearse el uso de esta nueva modalidad de trabajo, contemplando las ventajas y desventajas que puede conllevar para los componentes del grupo en particular, y para la organización en general.
Primero, hemos de introducir un concepto claro acerca de la flexibilidad horaria. Podemos definirla como el establecimiento de un horario voluntario para una parte de la jornada laboral de un trabajador. Esta parte del horario, según la tipología de flexibilidad horaria, puede estar marcada dentro de unas franjas horarias, o no. Lo que si es común a todos los tipos es que, independientemente de la configuración horaria, se deben de cumplir con el número de horas totales establecidas para el puesto de trabajo.
Ventajas de la flexibilidad horaria
La flexibilidad horaria implica una serie de ventajas, tanto para empresa como para empleados.
Desde el punto de vista de la organización, esta fórmula ayuda a una mejora del clima laboral, ya que aporta mayor libertad a los trabajadores, cediéndoles autonomía y capacidad de decisión en su forma de trabajar. Por consecuencia lógica, podemos entender que una mejora del clima laboral puede ayudar al trabajador a rendir de una manera más productiva y contribuye a un aumento de la creatividad y ergonomía en las tareas del puesto.
Otra ventaja para la organización es la reducción del absentismo laboral. Puesto que la flexibilidad horaria contribuye a una conciliación más pronunciada de la vida laboral y familiar, el trabajador obtiene unas mejores condiciones para, por ejemplo, no tener que ocupar jornadas laborales en solucionar temas personales.
En cuanto a las ventajas concretas para los trabajadores de la organización, además de los temas del aumento de autonomía y demás que hemos comentado en los párrafos anteriores, podemos destacar la mayor facilidad para que estas personas puedan decidir la parte de su jornada que dedican a cada tarea, pudiendo enfocar sus esfuerzos en función de las necesidades de cada momento, es decir, podrán elegir de forma autónoma el mejor momento para llevar a cabo las distintas acciones. Ello conlleva una mejora del rendimiento y un mayor desempeño diario.
Desventajas de la flexibilidad horaria
Pero no todo son beneficios en lo que al uso de la flexibilidad horaria se refiere. Pues, una aplicación sesgada de esta metodología puede provocar un mayor estrés al trabajador, descontrol en la organización y un efecto contraproducente en la conciliación de la vida familiar y laboral. Esto se debe a que la incursión de las nuevas tecnologías influye en que el trabajador, a pesar de no encontrarse en horas de trabajo efectivo, puede ser requerido para estar “conectado”, en cualquiera de los sentidos, si se encuentra dentro de las franjas horarias que la organización establezca. A su vez, si no se cuenta con un buen programa de medición de tiempos de trabajo, el descontrol para la organización en cuánto a medir las horas efectivas, puede ser mayúsculo.
De este modo, a pesar de considerar positivo e interesante el uso de la flexibilidad horaria, aconsejo que se establezcan unas pautas previas muy sólidas y detalladas para que un intento de mejora común no se acabe transformando en un gran problema para todos.
Comentarios
Totalmente de acuerdo. Ventajas e inconvenientes que se producen o se producirían.Pero la pregunta evidente, es el CÓMO se controla entonces esa » flexibilidad» de la que tanto se habla( pautas, programas, acciones,etc) y poco se concreta. Además hay que partir que ni los empresarios ni los empleados tienen el mismo sentido de responsabilidad, objetivos ni interés.