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Comentarios
Me da la impresión de que estos nuevos planteamientos tecnológicos no van a llegar a buen puerto. La ciencia, hasta ahora, partía de hipótesis, contrastación, tesis y conclusiones. Con la cultura de los prototipos no hay garantías de verificabilidad, ni certeza, ni continuidad. Por lo que he leído en su aportación y en el artículo enlazado, estamos abonados a la ‘subcultura del relativismo’. Como decía el filósofo, ‘todo fluye y nada permanece’. Si es así, el afán humano de conocer la verdad también es una utopía. Las nuevas tecnologías son un instrumento muy valioso para promocionar y conocer la cultura, pero no pueden ser el único, ni el mejor. Hay pueblos que carecen de ellas y no por éso dejan de ser cultivados y ejemplares en humanidad: sus tradiciones, su legado y su historia constituyen una parte importante de su identidad, de su presente y de su futuro.