Los estilos educativos de los profesores hacen referencia a la metodología usada por el docente, la innovación en su trabajo y su respectiva respuesta hacia el cambio. Trillo (1994) identifica tres estilos: técnico, práctico y crítico.
Los diferentes tipos de estilos educativo de los profesores
Estilo técnico
Se caracteriza por una distribución jerárquica del aula, donde el papel docente prima por encima del alumnado. Este tipo de docente acoge el libro de texto como el elemento fundamental del proceso de enseñanza-aprendizaje, ajustando la programación del aula y los contenidos a enseñar a los que trae de serie el libro de texto. Además es individualista en cuanto a la colaboración con sus compañeros. Respecto a su actitud con el alumnado, actúa como un juez cuya misión es separar a los alumnos con mayor rendimiento de los de menor rendimiento para prestar mayor atención al alumnado que trabaja mejor.
Una de las características fundamentales de este tipo de docente es que se muestra resistente al cambio, se siente amenazado cuando no es el experto en el tema y no se ve capacitado para controlar esa situación. Por tanto, no innova ni realiza cualquier actividad que se salga de su metodología tradicionalista.
Estilo práctico
Se caracteriza por no jerarquizar de una forma estricta el tiempo, el espacio, la distribución, las actividades, contenidos, etc., a diferencia del técnico concede menos importancia al libro de texto. No es individualista innato, pero la falta de compromiso de los demás compañeros lo puede llevar a adoptar una actitud individual. En cuanto a su actitud con el alumnado presta una atención igualitaria a todos ellos, amparándose en algunos principios de la Escuela Nueva. Se reconoce a sí mismo como una figura clave en el proceso de desarrollo del currículum.
Respecto a las características fundamentales de este tipo de docente destaca su actitud renovadora, abierto al cambio y al progreso
Estilo crítico
Se caracteriza al igual que el práctico en no jerarquizar de una forma estricta el tiempo, el espacio, la distribución, las actividades, contenidos, etc., prescinde parcialmente del libro de texto, optando por una metodología más constructivista y práctica. Respecto a su actitud con el alumnado también presta una atención igualitaria a todos ellos, su premisa máxima es: “o nos salvamos todos o no se salva ninguno”. La finalidad de la tarea de este docente es que todos remen en la misma dirección.
En cuanto a las características fundamentales resalta su actitud de renovación y apertura al cambio, es crítico con el panorama educativo pero al mismo tiempo espera a que cambie el sistema para que el cambio realmente funcione, puesto que tienen presente que las iniciativas particulares no son suficientes para el cambio educativo (Trillo, 1994).
Una vez conocidos los distintos estilos educativos de los profesores que distingue Trillo (1994), podríamos preguntarnos en el caso de ser docente si: ¿te identificas con alguno de ellos? O por el contrario, sino estás ligado al ámbito educativo podrías plantearte si: ¿recuerdas algún docente que te haya impartido docencia con alguno de estos estilos?
Comentarios
muy buena información
Excelente vision de la labor docente. Muy ilustrativo.Mi enhorabuena!!