Los escasos estudios sobre el Síndrome de Asperger nos sitúan ante un panorama de sombras para los niños y adultos que lo padecen. Y para las personas que conviven con ellos y no saben cómo intervenir de manera adecuada o, incluso, no creen que padezcan un trastorno, si no que es un niño insolente y revoltoso que no es capaz de hacer amigos.
Un sorprendente mundo por descubrir que afecta a entre 3 a 7 personas de cada 1000, y a 1 mujer por cada 4 varones.
Las personas que padecen el Síndrome de Asperger son a riesgo exclusión social
Hoy quiero hablaros del trastorno de Asperger, porque el desconocimiento generalizado por la sociedad y por los profesionales, frecuentemente posiciona a los que lo padecen en exclusión social; también, porque cualquiera que conozca a alguno de ellos, sabe del gran potencial que estas personas poseen, siempre que se les brinde la oportunidad de desarrollarse y se les estimule adecuadamente; y por muchas más razones personales que surgen cuando compartes experiencias con ellos. Por todo esto, quiero dejaros un breve acercamiento a este trastorno que os pueda ayudar si alguna vez tenéis la oportunidad de tratar con personas Asperger.
Clasificación del Síndrome de Asperger
El Síndrome de Asperger fue descrito por primera vez por el psiquiatra y pediatra austriaco Hans Asperger, en 1943. Su categorización en los manuales clínicos está cambiando. Tanto en el CIE-10 como en el DSM-IV, está catalogado como un Trastorno Generalizado del Desarrollo (TGD). Mientras que en el reciente DSM-V se ubica dentro de los Trastornos de Espectro Autista (TEA), ya que es considerado autismo de alto funcionamiento.
¿Cuáles son los síntomas del síndrome de Asperger?
Los síntomas que manifiestan las personas que padecen este trastorno, de forma general, son: dificultades en la interacción con otras personas, comunicación verbal limitada, déficit en la comunicación no verbal, intereses restringidos y absorbentes, patrones de comportamiento estereotipados y problemas de motricidad.
Estos síntomas no se dan en todos los que padecen el trastorno por igual. Es decir, que las personas Asperger pueden padecer todos o algunos de los síntomas y pueden ser manifestados de forma grave o leve.
Estas personas poseen una apariencia normal y una inteligencia normal, e incluso superior al resto de la media. Pueden llegar a desarrollar habilidades a un nivel sorprendente dentro de las áreas que son de su interés. Poseen un pensamiento con un estilo cognitivo distinto: lógico, concreto e hiperrrealista. Sin embargo, presentan comportamientos sociales inadecuados que les pueden llevar a la exclusión social.
Algunas de las características que pueden tener estas personas son:
- Socialmente torpe y difícil de manejar en su relación con los demás.
- Ingenuo y crédulo.
- A menudo sin conciencia de los sentimientos e intenciones de otros.
- Con grandes dificultades para llevar y mantener el ritmo normal de una conversación.
- Se altera fácilmente por cambios en rutinas y transiciones.
- Literal en lenguaje y comprensión.
- Dificultad para el contacto visual.
- Muy sensible a sonidos fuertes, colores, luces, olores o sabores.
- Fijación en un tema u objeto del que pueden llegar a ser auténticos expertos.
- Físicamente torpe en deportes.
- Incapacidad para hacer o mantener amigos de su misma edad.
- Memoria inusual para detalles.
- Habla de forma pomposa.
Si necesitáis más información o, simplemente queréis profundizar, aquí tenéis un par de enlaces que pueden seros muy útiles. Pero la mejor fuente, y sobre todo de cara a los profesionales de la educación que necesiten recursos y consejos para intervenir diariamente con ellos, os recomiendo contactar con la asociación especializada en trastorno de Asperger más cercana que tengáis. Ellos os podrán orientar de manera personalizada y más eficaz.
Como en el vídeo se deja ver, comprender su mundo puede ser tan complicado para nosotros, como para ellos entender el nuestro. Pero tan necesario como que desaparezcan las barreras de accesibilidad para las personas como movilidad reducida. Construyamos un mundo inclusivo, en el que todos tengamos cabida y seamos libres de desarrollarnos. Porque todos merecemos esa oportunidad.
Comentarios
Me parece estupendo que hoy en día se de a conocer un poco más el Síndrome, puesto que todavía sigue siendo desconocido, incluso entre los profesionales que están más en contacto con niños, adolescentes y adultos que lo padecen. Sea cual sea vuestra formación, psicólogos, pedagogos, educadores sociales, psicopedagogos, maestros, etc. os recomiendo formaros en este Síndrome. Son personas fascinantes, sobre todo si tenéis la oportunidad de trabajar con ellos y ver que su forma de ver el mundo es más noble, entretenida y maravillosa de lo que podemos pensar.
Un saludo y ¡enhorabuena a Sofía por el post!
Tamara García
Psicóloga Asociación Asperger Granada