«Usabilidad web es el atributo de calidad que mide lo fáciles que son de usar las interfaces web» Jakob Nielsen
Imaginemos que somos un viajero que entra en el metro. Aún sin conocer el recorrido a seguir, ni las estaciones, la mayoría de pasajeros no tendrán el más mínimo problema en encontrar su línea y después su andén. Esto es gracias al sistema de señalética que los metros tienen. En cada entrada, intersección o lugar de duda hay señas que indican el camino. A veces sólo para confirmar que has tomado el recorrido correcto.
Ahora bien, en el mundo digital, ¿cómo podemos guiar a nuestros pasajeros de forma tan efectiva? ¿Cuál es el sistema que permite que un usuario sin ningún conocimiento previo acceda a un entorno digital y sepa de forma casi natural llegar a su destino?
Para diseñar los caminos por los que habitarán los usuarios y hacerlos claros, transitables y entendibles, debemos comprender qué es la usabilidad.
Las claves de la usabilidad web
1. La relación del usuario con lo que hay en pantalla
La usabilidad nos habla de la relación que se crea entre el usuario y aquello con lo que interactúa en la pantalla. Lo ideal es que esta comunicación sea fluida, útil y satisfactoria. Si el usuario puede acceder con facilidad al contenido, y comprende de forma rápida su organización y navegabilidad, podemos decir que hay una buena usabilidad.
2. Una materia en constante movimiento y evolución
Debemos tener en cuenta que esta es una disciplina en perpetua evolución, al igual que lo digital mismo. Sus profesionales están en formación continua. Son investigadores que intentan desvelar patrones y establecer códigos, con la dificultad de saber que en este terreno no hay reglas absolutas.
El fin de la usabilidad es crear unas pautas, basadas en la investigación, sobre cómo nos relacionamos y entendemos los entornos digitales. Y mantener el equilibrio entre contenido, diseño y formato.
3. Un ámbito transdisciplinar
Los profesionales de este sector estudian en general el comportamiento frente a la tecnología, las necesidades a cubrir y las posibilidades a explorar. Y en particular desarrollan tecnología amigable para las personas.
Pero, con una disciplina de esta naturaleza, multidisciplinar y transdisciplinar ¿cómo puede ser un equipo dedicado a la usabilidad? Un equipo de experiencia de usuario (UX) cubre la totalidad de experiencia, y puede incluir un amplio abanico de profesionales. Podemos encontrar equipos que incorporan investigadores (psicólogos o testeadores), arquitectos de la información, especialistas en contenido, diseñadores visuales, interactivos o de movimiento, programadores…
Desde la perspectiva más simplista, un equipo UX estudia dos mundos: real y virtual. Y se dedica a trabajar en la frontera. A hacer que la transición sea un paso.
En ese territorio borroso, procura que haya un ciclo de entendimiento entre real y digital, en el que lo real alimenta a lo digital y lo digital alimenta al usuario. Veamos cómo.
4. Intuición: lo digital se adapta al usuario
La intuición es la facultad para comprender las cosas instantáneamente, sin necesidad de razonamiento. Por tanto, la intuición recae sobre cosas que conocemos a nivel primario, inconsciente.
Google nos dice en Material Design de forma algo enigmática que existe en lo digital una metáfora material. La metáfora es partir de cómo funcionaría una pantalla si realmente tuviéramos unos elementos de papel esparcidos por una mesa, de qué forma interactuaríamos instintivamente con ellos (centrándonos en uno, superponiendo, apartando).
Si lo digital imita lo real, en cuanto a interacción y movimiento, la navegación nos resultará mucho más natural. Conservando un vínculo con la realidad, podemos dejar espacio a lo instintivo. Ese instante de conexión, esa idea sobre una App de “¿Y si hago así?” es la intuición.
Sin embargo, aunque los principios parten de lo real, y nos dan una orientación básica útil, lo digital supera a lo real. Y sería imposible no explotar sus posibilidades.
5. Aprendizaje: el usuario asimila lo digital
No todo es intuición, ni la intuición lo resuelve todo. Estamos en un entorno extraño y el usuario debe comprender que también hay un aprendizaje.
Volviendo a la metáfora del metro, la señalética es el sistema para dirigir al pasajero, pero éste debe conocer unos mínimos sobre el funcionamiento de ese sistema. Debe saber, al menos, que primero ha de encontrar su línea, y luego la dirección, para colocarse en el andén correcto.
Inicialmente, para solucionar una necesidad se crea un componente. Este componente puede ser más o menos obvio, pero todos pasan por un proceso de comprensión hasta su aceptación. Una vez se convierten al algo asimilado y estandarizado, nos da pie a seguir avanzando hacia otros elementos.
6. Cuestión de comunicación
La usabilidad se ocupa principalmente de comunicar. Cuida y asegura que el flujo de información llegue y sea comprendida. Diseño e información deben aunar esfuerzos para lanzar el mismo mensaje.
La efectividad final depende por un lado del uso de los estándares, que son los elementos que ya cuentan con cierta aceptación del usuario, facilitando un entendimiento común y un avance al unísono. Y por otro de la precisión del detalle, y es que los estándares, si se entallan a la medida exacta del proyecto, darán un resultado mejor.
Por último, para conseguir una respuesta del público, necesitamos conocer en profundidad a nuestro usuario, su contexto, necesidades y deseos. Y dirigir nuestro producto específicamente hacía él.
7. Valorar lo invisible
La usabilidad tiene grandes aspiraciones. Es un campo ambicioso que conoce su potencial, pero a veces peca de no visibilizarse. De hecho, si la usabilidad es buena, nadie debe notarla ni acordarse de ella. De forma velada, el desafío es configurar las pautas de un idioma mudo, visual e interactivo: el lenguaje digital. Un lenguaje universal.
Los profesionales de la usabilidad son creadores de los entornos que se han convertido en sitios totalmente cotidianos para nosotros a día de hoy. Y serán los diseñadores de los espacios futuros.
Comentarios
Estoy estudiando ux design y este articulo me ha ayudado muchísimo a comprender más a fondo a que nos referimos al momento de hablar de usabilidad, muchisimas gracias, un abrazo 🙂