En estos dos últimos años, no se deja de hablar de la niacinamida en el mundo de la Cosmética y Dermofarmacia y muchos se han preguntado: ¿niacinamida, para qué sirve?. De hecho, se está incorporando este ingrediente cada vez más en la rutina de cuidados de los usuarios de los productos cosméticos y se ha convertido en el ingrediente cosmético estrella.
Si quieres saber más sobre esta molécula, sigue leyendo. En este post te explicaremos en qué consiste la niacinamida, sus propiedades, sus indicaciones, su grado de seguridad y sus aplicaciones en el mundo de la cosmética y de la dermofarmacia y, los motivos por los cuales se ha convertido en el ingrediente de moda.
¿Qué es la niacinamida?
La niacinamida es conocida también como vitamina B3, nicotinamida o vitamina PP. La vitamina B3 o vitamina PP es un grupo de vitaminas que contiene el ácido nicotínico (niacina) y la nicotinamida (niacinamida). La niacinamida se forma a partir de la niacina de tal manera que la niacina se transformará en niacinamida al ingerirse en cantidades mayores a las que el organismo necesita.
Desde un punto de vista fisicoquímico, la niacinamida es soluble en agua y en alcohol, es estable a altas temperaturas, presenta un bajo peso molecular y por tanto penetra en la capa más externa de la epidermis. La niacinamida es fácilmente disuelta en agua y bien absorbida cuando se ingiere. La niacinamida es necesaria para el funcionamiento adecuado de la grasa y de la glucosa en el organismo para mantener las células sanas.
Por otra parte, la niacinamida corresponde a un precursor de unos cofactores responsables de una serie de reacciones enzimáticas de la piel. Finalmente, juega un papel importante en muchas reacciones de oxidorreducción en las que ejerce como antioxidante.
¿Niacinamida para qué sirve?
La niacinamida juega una función importante en la síntesis de nutrientes celulares, producción de la energía que necesitan las células y, en la síntesis y reparación del ADN aumentando su eficiencia energética. También actúa en el metabolismo y en el envejecimiento celular retrasándolo. Una falta de niacinamida en nuestro organismo puede provocar una enfermedad rara conocida como la pelagra que puede llegar a ser muy grave ya que se manifiesta con dermatitis, diarrea, demencia y hasta la muerte.
Indicaciones de la niacinamida
Alteraciones dermatológicas
Según la evidencia científica, los productos cosméticos que contienen niacinamida pueden aplicarse vía tópica en las siguientes alteraciones dermatológicas:
- Hiperpigmentación. La niacinamida evita el paso de la melanina a las células de la epidermis donde se acumularía y formaría las manchas en la piel visible.
- Acné. Según algunos estudios de investigación preclínicos, la niacinamida presenta un efecto antibacteriano y reduce la inflamación de la piel. Por otra parte, frena la producción de sebo de la piel.
- Dermatitis atópica y rosácea. La niacinamida estimula la producción de las cerámidas, por lo que mejoraría estas dos alteraciones dermatológicas.
Otras enfermedades…
Por otra parte, se ha estudiado que la niacinamida podría jugar un papel preventivo y en el tratamiento de algunas enfermedades tales como:
La diabetes. Parece ser que ayudaría a prevenir la ausencia de producción de la insulina en niños con diabetes tipo 1 con un diagnosticados reciente y a mejorar el control de la diabetes tipo 2 en adultos.
La artrosis. Mejora la flexibilidad articular y disminuye la inflamación y el dolor que cursan en la artrosis.
La hiperfosfatemia. Disminuye los niveles de fosfato en sangre y presenta una aplicabilidad clínica sobre todo en pacientes que se encuentran en hemodiálisis.
El cáncer de piel. Algunos estudios han puesto en evidencia que la ingesta de niacinamida interviene en la reparación del ADN dañado por la exposición al sol.
Así, debido a su versatilidad, hay que reconocer que la niacinamida trata muchos aspectos en el cuidado de la piel de cualquier tipo y presenta varios efectos beneficios.
Beneficios de la Niacinamida
Hidratante. La niacinamida repara la barrera cutánea ya que aumenta la producción de ceramidas y ácidos grasos.
Antiacné y seborregulador. Por sus propiedades seborreguladoras y antiinflamatorias, ayuda a tratar el acné.
Antienvejecimiento. Posiblemente, la niacinamida aumentaría la producción de colágeno, lo que se traduciría en disminución de las arrugas, aumento de la elasticidad de la piel y la obtención de unas líneas de expresión más suaves.
Antioxidante. Protege la piel del daño de los radicales libres que pueden generar los contaminantes atmosféricos y repara los daños de la luz ultravioleta.
Antimanchas. La niacinamida mejora la textura y la hiperpigmentación de la piel ya que la aclara inhibiendo la transferencia de los melanosomas a los queratinocitos vecinos.
Antirrojeces y calmante. Al reducir el enrojecimiento la irritación cutánea, podría ser un aliado perfecto para pieles sensibles.
¿La niacinamida es segura?
Ante todo, es importante tener en cuenta si se va a aplicar vía tópica o se va a tomar vía oral. La niacinamida aplicada en la piel, en principio presenta un buen perfil de seguridad, aunque en algunos casos podría generar picazón y enrojecimiento. Por vía oral, se ha demostrado que es segura siempre y cuando se ingiera a dosis menores o igual a 3 g/día.
Por otra parte, como advertencias acerca de su uso, se señalan a unas poblaciones específicas donde se ha de administrar con cierta precaución:
– En las embrazadas. La dosis no ha de superar los 30 mg/día.
– Pacientes con diabetes. No se recomienda su uso ya que compromete la efectividad del fármaco antidiabético aumentando los niveles plasmáticos de glucosa.
– Pacientes con insuficiencia renal y en diálisis. Una ingesta de niacinamida podría disminuir los niveles plaquetarios.
– Pacientes que sufren úlceras. El uso de la niacinamida se encuentra contraindicado en este grupo poblacional.
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