He de reconocer que cuando conocí la expresión ‘coaching’ nutricional -hace más de 10 años- la primera impresión que tuve fue bastante desalentadora. Me dio un poco de dentera, como cuando chirría la tiza sobre la pizarra, pero sobre todo me produjo cansancio al constatar, una vez más, el uso de un nuevo anglicismo. No obstante, hay una razón que explicaría el uso de tanto inglés.
Existe un latinajo que dice: ‘quidquid latine dictum sit, altum videtur’, cuya traducción parece una profecía autocumplida y viene a decir que cualquier cosa que se exprese en latín suena mucho más profunda o erudita. Si bien esta forma de pensar podría ser válida hace décadas, hoy y en español, ese “cualquier cosa dicha en latín” la hemos cambiado por “cualquier cosa dicha en inglés”. De este modo, al usar expresiones en inglés, la actividad referida aparenta ser más profesional, moderna y, por tanto, eficaz. Así, y sin salirnos del marco de la nutrición, a todos nos suenan o incluso hemos usado, expresiones como: mindful eating, keto, detox, CICO (de calories in vs calories out), gluten o sugar-free, etcétera. El problema aquí es que en no pocas ocasiones el uso de estas expresiones tiene más de postureo que de un conocimiento real sobre aquello de lo que se habla.
Sin embargo, el tiempo me quitó la razón, y a día de hoy es preciso reconocer en el ‘coaching’ nutricional un enfoque -relativamente- novedoso y particularmente exitoso a la hora de alcanzar la necesaria adherencia, verdadero elemento decisivo a la hora de consolidar cambios en los estilos de vida y, en este caso, en los hábitos alimentarios. Siempre y cuando, eso sí, esté conducido por expertos consolidados en esta materia.
¿Qué es el ‘coaching’ nutricional?
En palabras de dos grandes expertos, Yolanda Fleta y Jaime Giménez, a partir de su libro “Coaching nutriconal: haz que tu dieta funcione”, este es un proceso a través del cual la persona identifica y vence sus obstáculos, crea el entorno adecuado y adopta la actitud y la determinación necesarias para conseguir el cambio en su alimentación, logrando a su vez mejorar otros aspectos de su persona y de su estilo de vida. La novedad de este enfoque es que está diametralmente enfrentado al planteamiento clásico del “sermón” del dietista-nutricionista hacia el paciente. El ‘coaching’ nutricional pone al paciente en el centro de su tratamiento y facilita que sea él el protagonista y responsable de su tratamiento a través de la autogestión. Por tanto, el quid de la cuestión en este sistema no lo vamos a encontrar es la consabida y típica “dieta”, ni tan siquiera en la fama del profesional. Más al contrario, el núcleo del ‘coaching’ nutricional está completamente focalizado hacia el empoderamiento del paciente, en hacerlo autosuficiente, de una vez y por todas, en la gestión de sus elecciones alimentarias.
En busca de la adherencia
A día de hoy, los principales investigadores mundiales al respecto del concepto “dieta” y en especial de todas aquellas cuestiones relacionadas con la pérdida de peso, reconocen que no es especialmente difícil adelgazar en un momento dado, lo difícil es mantener en el tiempo esa pérdida. Así, están convencidos de que la clave para adelgazar y conservar esa pérdida de peso no está en ninguna “dieta” en general, ni tampoco en ninguna combinación de macronutrientes en particular, sino en alcanzar la adherencia del paciente a ese sistema dietético -sea el que sea- con el que se ha logrado adelgazar. Así, el abordaje de las cuestiones nutricionales adquiere nuevas dimensiones, la psicológica y la sociológica casi siempre olvidadas, con el fin de que cada persona, en virtud de sus circunstancias, alcance a perpetuar y consolidar un estilo dietético óptimo o al menos más adecuado.
Ventajas de seguir un programa de coaching nutricional
En este sentido, el ‘coaching’ nutricional consigue buenos resultados porque se centra en diversos aspectos al mismo tiempo:
- Ayudando al paciente a vencer su resistencia al cambio.
- Haciéndole consciente de sus hábitos.
- Estableciendo un plan de acción concreto para alcanzar sus objetivos.
- Enfrentando sus posibles obstáculos y aportando soluciones para su caso particular.
- Ofreciéndole apoyo emocional.
Los riesgos del ‘coaching’
Básicamente son dos. El primero de ellos consiste en no tomar en suficiente consideración la figura del especialista, del ‘coach’ y, en su lugar, creer que esto del ‘coaching’ es una moda y que todo el mundo vale. Tristemente hay quien, al abrigo de la moda y sin una formación específica o adecuada, se ha lanzado a ofrecer los servicios de ‘coaching’ nutricional sabedor de la buena acogida que tendría un nombre tan evocador. Dicho de forma breve: algunos profesionales que ofrecen servicios de ‘coaching’ solo tienen de ‘coaching’ el nombre para captar clientes.
No es fácil ser un buen ‘coach’. El problema en este terreno, y de ahí una de las críticas más habituales sobre este tema, reside en conocer que no hay una titulación oficial y reconocida por la administración. Así que, antes de lanzarse en brazos de cualquier profesional que ofrezca esta clase de servicios, conviene informarse sobre sus credenciales y muy en especial sobre su experiencia y forma de trabajar.
El segundo de los riesgos refiere a los propios usuarios. El ‘coaching’ es una herramienta para personas especialmente proactivas que se reconocen a sí mismas como el actor principal de su cambio. Es probable que algunas personas, a la luz de ciertas promesas especialmente optimistas asociadas a la promoción del ‘coaching’ piensen que es un procedimiento más, otro sistema milagroso en el que un especialista hará sus “trucos de magia” para que alguien adelgace.
Conclusión sobre el coaching
Pero no hay nada más alejado de la realidad. Tal y como ya se ha comentado, el “misterio” del ‘coaching’ nutricional no radica en la información que recibe el paciente como sujeto pasivo; más al contrario sí en su implicación para trabajar junto al profesional. Es en ese trabajo conjunto en el que profesional y paciente delimitarán objetivos, identificarán obstáculos particulares, definirán el plan de acción y monitorizarán el cambio. Muy en resumen, el ‘coaching’ nutricional sería justo lo contrario a seguir el típico libro de dietas de cualquier gurú que en un momento determinado se haya hecho famoso.
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Comentarios
Excelente es para tener para mas Eficacia y mayor Autoestima y una Salud Integral
Excelente artículo, me saco muchas dudas con respecto a la orientación de couching