Ratio de rentabilidad
La rentabilidad es una pieza fundamental en el análisis financiero, ya que permite a los inversores entender cómo serán compensados por dedicar sus recursos a una empresa o proyecto específico. Para evaluar la rentabilidad, se recurre a ratios financieros que comparan distintas cuentas de los estados financieros.
La "ratio de rentabilidad" es una medida financiera que se utiliza para evaluar la capacidad de una empresa para generar ganancias en relación con sus recursos financieros o de inversión. Miden el rendimiento de una empresa, poniendo en relación los beneficios obtenidos con distintas magnitudes. En el ámbito empresarial, se divide en dos categorías principales: el ROA (Beneficios netos / Activo total) y el ROE (Resultados después de impuestos / Fondos propios medios).
Mantener niveles adecuados de rentabilidad es crucial para la viabilidad de las empresas, y para calcularla, se utilizan los datos de la cuenta de Pérdidas y Ganancias.
La Rentabilidad Financiera (ROE), por su parte, proporciona información sobre el rendimiento promedio obtenido por la empresa en relación con sus fondos propios o nivel de capital expresado en tasa (%). Se calcula dividiendo el Beneficio Neto entre los Fondos Propios promediados. Un ROE adecuado es aquel que supera los tipos de interés del mercado financiero más la prima de riesgo de la empresa o sector. Cuanto mayor sea el ROE, mejor, ya que indica la capacidad de la empresa para generar valor para sus accionistas. En este sentido proporciona a los propietarios de la empresa una comprensión clara del rendimiento generado por su inversión en la empresa, permitiéndoles compararlo potencialmente con el coste de oportunidad asociado al capital.
Por otro lado, la Rentabilidad Económica (ROA o ROI) evalúa el rendimiento de los activos de la empresa en términos de generación de valor, este también se expresa en tasa (%) independientemente de cómo hayan sido financiados y de cuestiones fiscales. Se calcula dividiendo el Beneficio antes de Intereses e Impuestos (BAII) entre los activos totales medios del año. El ROA se compara con el coste de la deuda, siendo preferible que el ROA sea mayor para garantizar la capacidad de obtener financiamiento. Es importante tener en cuenta que los activos de una empresa reflejan el conjunto total de inversiones que la empresa posee en reserva, incluso si no todos ellos se han utilizado en la operación. Sin embargo, esta medida nos proporciona un indicio inicial sobre la eficacia en la gestión de los activos.
Es crucial realizar un informe de rentabilidad antes de iniciar cualquier proyecto empresarial o de inversión, ya que este análisis determina su viabilidad en función de la rentabilidad ofrecida. En caso de que el informe demuestre que el proyecto no es muy rentable, se deben considerar otras ventajas que justifiquen su inicio.