Fondos cotizados
Uno de los conceptos financieros que están cogiendo más protagonismo en los últimos tiempos son los denominados Fondos Cotizados, gracias a su sencillez y ventajas. Como su nombre indica, son fondos que cotizan el mercado de valores y, por tanto se compran y venden en bolsa.
¿Qué son los Fondos Cotizados?
Los Fondos Cotizados, también conocidos por sus siglas en inglés como ETF (Exchange Traded Funds) son instrumentos de inversión colectiva que se encuentran entre las acciones y los fondos de inversión. Con las primeras, las acciones, comparten su liquidez a que se pueden comprar y vender fácilmente en una sesión en bolsa. De los segundos, de los fondos de inversión, han cogido la ventaja que supone su diversificación.
De esta forma, los fondos cotizados se consideran instrumentos que permiten a los inversores adquirir una cesta de activos diversificados (acciones, bonos..) a través de un solo producto que cotiza en bolsa igual que lo hace una acción.
La estructura de los ETFs se basa en un fondo que posee un conjunto de activos subyacentes, cuyo objetivo es replicar el comportamiento de un índice, sector, commodity u otro activo financiero. Es decir, cuando se adquiere un EFT, en realidad se esta comprando una cartera pequeña de títulos como acciones y bonos, creada con la finalidad de replicar un índice de mercado concreto. De esta forma ofrecen los mismos riegos y rendimientos que dicho índice.
Existen infinidad de tipos de EFTs que harían imposible un listado completo pero si podemos mencionar los mas importantes.
- EFTs físicos o sintéticos. Los físicos se encargan de adquirir las acciones que buscan replicar, mientras que los sintéticos la réplica la hacen en base a derivados financieros.
- EFTs de reparto y de acumulación. Los primeros van a pagar dividendos mientras que los segundos no.
- EFTs sectoriales o temáticos Son aquellos que invierten en acciones de un determinado sector como pueden ser las tecnológicas, mineras, o biotecnología.
- ETFs de Renta Variable: Replican índices de acciones, como el S&P 500 o el IBEX 35. Son los más comunes y permiten invertir en una amplia gama de acciones a través de un solo productos.
- ETFs de Renta Fija: Replican índices de bonos gubernamentales o corporativos. Son ideales para quienes buscan estabilidad y rentabilidad más predecible.
Los Fondos Cotizados cuentas con una serie de ventajas sobre la adquisición directa de acciones o la inversión en fondos de inversión, destacando las siguientes:
- Diversificación: Al replicar un índice, los ETFs ofrecen exposición a múltiples activos con una sola inversión, lo que reduce el riesgo.
- Flexibilidad y liquidez: Los ETFs pueden comprarse y venderse en cualquier momento durante el horario de mercado, lo que permite una mayor flexibilidad frente a los fondos tradicionales, que solo se pueden negociar al cierre.
- Bajos Costes: Los ETFs suelen tener comisiones más bajas que los fondos gestionados activamente, dado que la mayoría son de gestión pasiva.
- Transparencia: Los ETFs informan diariamente sobre sus participaciones, lo que proporciona una mayor visibilidad para los inversores.
- Acceso a Mercados Diversos: Los ETFs permiten a los inversores acceder a mercados o activos que de otro modo serían difíciles o costosos de adquirir directamente, como mercados emergentes o sectores específicos.
Pero también, a la hora de invertir debemos tener cuidado con los inconvenientes que pueden presentar estos fondos.
- Riesgo de Mercado: Aunque los ETFs permiten diversificación, siguen estando expuestos a la volatilidad del mercado. Si el índice que replican cae, el valor del ETF también disminuirá.
- Tracking Error: Existe la posibilidad de que el ETF no replique perfectamente el comportamiento del índice debido a costes operativos, lo que genera un pequeño desajuste entre el rendimiento del fondo y el índice.
- Comisiones de Intermediación: Aunque los ETFs tienen comisiones de gestión bajas, las comisiones de compraventa pueden ser altas si se realizan muchas transacciones.
- Productos Complejos: ETFs como los inversos o apalancados son productos complejos que pueden no ser adecuados para todos los inversores debido a su alto riesgo y volatilidad.