Contabilidad de costes
Cuando hablamos en general de contabilidad realmente lo podemos estar haciendo de muchos tipos de la misma. La denominada contabilidad analítica o de costes (o interna) es una rama de la contabilidad que se encarga de analizar cómo se distribuyen los costes y los ingresos que genera una empresa.
La contabilidad de costes pretende evaluar la eficiencia y la eficacia de la propia gestión de la empresa.
Para las sociedades que no se dedican a la mera distribución sino a la elaboración de productos e incluso a algunas que prestan servicios, desarrollar una contabilidad de costes es esencial para muchas tareas que van desde la posibilidad de fijar precios a los mismos que hagan rentable su actividad, hasta la elaboración de presupuestos y el análisis de la marcha económica de las mismas. Para empezar el desarrollo de esta rama contable en nuestro curso hemos planteado esta primera unidad como una introducción al concepto de esta contabilidad de diversos autores y su evolución hasta llegar a la definición más reciente de la misma.
Conocido su propósito, analizaremos sus funciones y objetivos aunque, como paso previo, entendemos que será necesario hacer una distinción entre esta rama de la contabilidad y la contabilidad financiera (o externa).
Al tratarse de un ámbito contable algo más restringido y no utilizado por todas las empresas, es cierto que las diferentes propuestas de contabilidad de costes o de gestión generan en nuestra terminología algunos conceptos que suelen desorientarnos como son sistemas, métodos de coste, modelos de costes o procedimientos.
La contabilidad de costes, también conocida como contabilidad analítica, es una rama de la contabilidad que busca estudiar la forma en la que una empresa distribuye los costes, y sus ingresos con el objetivo de hacer una evaluación sobre la eficacia y eficiencia de la gestión empresarial.
La rama principal de la contabilidad en este ámbito se denomina Contabilidad de Gestión y se define como un sistema informativo responsabilizado con la presentación de información contable relevante y oportuna para poder tomar decisiones.
La información facilitada por la contabilidad ha de ser relevante en el sentido de que sea útil a la hora de la toma de decisiones. Por otra parte, también debe ser oportuna, es decir, que debe conocerse en el momento que realmente se necesita. La oportunidad de la información contable se adelanta a veces a los hechos a través de los presupuestos.
Dentro de la Contabilidad de Gestión, una de sus partes más desarrolladas es la Contabilidad Analítica de Explotación, cuyo nombre más tradicional es el de Contabilidad de Costes o Contabilidad Interna.
Al principio, la contabilidad de costes únicamente se encargaba del estudio de la estructura de costes de las empresas industriales, por esta razón, en un principio se empezó a denominar Contabilidad Industrial.
La contabilidad de costes tiene apenas dos siglos de historia, pero ha ido sufriendo una serie de transformaciones que han hecho que se consolide como una parte muy importante de la contabilidad.
La Revolución Industrial ha marcado un antes y un después en la contabilidad de costes debido a las características que presentaban los procesos productivos de las industrias. Antes de la Revolución Industrial, el empresario era propietario de la empresa, pero casi la totalidad de la actividad que se realizaba en la empresa se encargaba a empresas externas, por lo que el empresario representaba toda la actividad a través de la contabilidad financiera.
En definitiva, La contabilidad de costes establece previsiones iniciales referidas a las ventas y los márgenes a obtener sobre las mismas que luego se compararán con las cifras reales.