Burbuja especulativa
Las burbujas especulativas, también llamadas burbujas financieras, o de mercado, son un fenómeno que nace en los propios mercados, la gran mayoría de las veces como consecuencia de la especulación. Las burbujas financieras aparecen cada cierto tiempo y son el punto de inflexión entre un momento de expansión económica y otro de crisis. La economía ha atravesado a lo largo de la historia por fases alcistas (mejora económica y más empleo) y bajistas (la economía cae y entra en crisis).
Hablamos de la existencia de una burbuja de determinado activo, cuando ese elemento está viviendo una subida prolongada y anormal en su precio, de forma que el precio que está recibiendo se aleja cada vez más de su precio de equilibrio en el mercado o, quizá, de su valor real o intrínseco. Por tanto, se trata de un proceso dinámico que, a veces, lleva a la presencia de nuevos compradores con la esperanza de poder vender ese producto a un precio mayor en el futuro. Este proceso provoca una auténtica espiral de subidas continuas en el precio.
Una vez que el precio del activo ha alcanzado niveles irracionalmente altos, acabara estallando. Esto ocurre como consecuencia de la especulación, como fenómeno económico que ha estado presente a lo largo de la historia del capitalismo. Este fenómeno surge cuando los agentes compran determinados activos o productos con la expectativa de que su precio subirá y podrán venderlo posteriormente más caro, obteniendo beneficios gratuitos.
La especulación es considerada una profecía autocumplida, pues al creer los compradores que el precio de un determinado activo va a subir, lo adquieren, provocando un incremento en la demanda, que trae como consecuencia un aumento en el precio del objeto de la especulación, que deja de ser una señal eficiente de la escasez del mercado. El exceso especulativo concluye en numerosas ocasiones en crisis, crac o pánico. Este desencadenamiento del pánico da lugar a la venta masiva del activo, en un momento, donde precisamente hay pocos compradores.
El crash o estallido de la burbuja
El crash o estallido de la burbuja, provoca la brusca caída de los precios, llevándolo a precios realmente muy bajos, que incluso pueden llegar a niveles inferiores a lo que sería su precio más natural.
De manera desconcertante, las burbujas ocurren incluso en mercados experimentales altamente predecibles, donde la incertidumbre es eliminada y los participantes del mercado deben ser capaces de calcular el valor intrínseco de los bienes simplemente examinando el flujo de dividendos esperado.
El caso más reciente, en España, se puede observar dentro del sector inmobiliario. El cual constituyó una burbuja especulativa que fue agrandándose desde 1992 hasta explotar en 2007, junto con la crisis financiera a nivel mundial.